¿Qué es el fingering y cómo llevarlo a cabo?

¿Qué es el fingering?

El fingering es una práctica sexual que consiste en la estimulación de los genitales utilizando únicamente los dedos. Esta técnica puede incluir caricias suaves, masajes, estimulación manual... ¡Todo vale! Y aunque es común pensar que el fingering es solo para personas con vulva, la realidad es que puede ser igualmente excitante al estimular el pene, los testículos, la zona anal... ¡Todo es cuestión de explorar!

Beneficios del fingering

El fingering no solo es una práctica placentera, sino que también aporta numerosos beneficios. Aquí te dejamos algunos de ellos:

• Mejora tu vida sexual: Tanto si lo practicas en solitario como en pareja, el fingering te permite conocer mejor tus zonas erógenas y cómo te gusta ser estimulado.
• Reduce el estrés: La estimulación sexual libera endorfinas, las cuales generan una sensación de bienestar y relajación.
• Orgasmos más intensos: Al conocer mejor tu cuerpo, podrás alcanzar orgasmos más intensos y satisfactorios.
• Mejora el sueño: Sí, has leído bien. La relajación que se experimenta después de un orgasmo puede ayudarte a conciliar el sueño.
• Previene infecciones: En el caso de las personas con vulva, el fingering puede ayudar a prevenir infecciones al estimular la producción de fluidos vaginales.
• Alivia dolores menstruales: También en el caso de las personas con vulva, el fingering puede ayudar a aliviar los dolores menstruales.
• Mejora la calidad del esperma: En el caso de las personas con pene, el fingering puede mejorar la calidad y cantidad del esperma.

Consejos para practicar el fingering

Antes de lanzarte a explorar esta técnica, es importante tener en cuenta algunos consejos:

• Higiene: Como en cualquier práctica sexual, la higiene es fundamental. Asegúrate de tener las manos limpias antes de empezar.
• Cuida tus uñas: Unas uñas largas o mal limadas pueden causar daños en las zonas que vayas a estimular. Asegúrate de que tus uñas estén suaves y bien cuidadas.
• Hidrata tus manos: Unas manos hidratadas harán que la experiencia sea más agradable.
• Usa lubricante: Aunque la zona genital produce su propia lubricación, añadir un poco de lubricante puede intensificar las sensaciones.

¿Cómo practicar el fingering?

Ahora que ya conoces la teoría, es momento de pasar a la práctica. Aquí te dejamos algunas técnicas que puedes probar:

• Excitación primero: Antes de empezar, asegúrate de estar excitado. La excitación no solo se produce en los genitales, sino también en la mente. Crea el ambiente adecuado para que la excitación llegue de forma natural.
• De arriba a abajo: En personas con vulva, puedes empezar haciendo movimientos de arriba a abajo, frotando lentamente. No vayas directamente al clítoris, sino que estimula las zonas cercanas e ir poco a poco acercándote a él.
• Da un rodeo: No te obsesiones con llegar al clímax rápidamente. Dedica tiempo a las zonas alrededor, como los labios vaginales en el caso de tener vulva, o la zona de los testículos y el perineo en el caso de tener pene.
• Dedos ágiles: En el caso de las personas con pene, puedes estimular el glande utilizando únicamente dos dedos: el pulgar y el índice. Masajea de menos a más, según lo que prefieras o prefiera tu pareja.
• Estimulación anal: El ano es una zona llena de terminaciones nerviosas que puede proporcionar mucho placer. Masajea la zona perianal y, si te sientes cómodo, puedes probar a introducir un dedo lentamente. Recuerda que el ano no lubrica de forma natural, por lo que es importante usar un lubricante adecuado.

Recuerda que todas estas técnicas pueden disfrutarse tanto en solitario como en pareja. El fingering es una forma maravillosa de redescubrir el placer y de experimentar nuevas sensaciones. ¡Anímate a explorar!